Es indudable que la práctica del cultivo celular es de vital importancia tanto para las ciencias básicas como las aplicadas. Desde sus inicios en el año 1900, esta metodología se convirtió en una de las principales herramientas con las que cuentan los investigadores para intentar replicar lo que ocurre in vivo a menor escala, como por ejemplo: paso de moléculas a través de la membrana plasmática, biogénesis de organelos, aumento de la expresión de una proteína en respuesta a un estímulo específico, diferenciación celular, inhibición de la proliferación de células cancerígenas y muchos otros procesos.
Luego de casi más de un siglo de desarrollo, la expansión y modernización del proceso de cultivo celular ha generado una demanda de tecnologías que permiten la estandarización y la documentación precisa de los efectos que ocurren a nivel celular, y al mismo tiempo, una reducción en la carga de trabajo. Dado que un proceso de cultivo celular eficaz sienta las bases para el éxito del estudio científico, se hace necesario contar con herramientas que permitan observarlo con claridad, de manera amigable, con un alto poder resolutivo y también documentar su crecimiento, para dar así continuidad a su seguimiento.
Es así que gracias a compañías como OLYMPUS, líder en microscopía a nivel mundial en el desarrollo de tecnologías de vanguardia en este campo, podemos disponer de equipos que aseguran la calidad y reproducibilidad de los resultados, a través de un seguimiento sistemático del cultivo celular. Este flujo se puede descomponer en las siguientes etapas: siembra de células en un frasco de cultivo, crecimiento celular en incubador, chequeo de confluencia y morfología, resuspensión de células en cultivo, conteo y siembra de células en soporte para la siguiente etapa estudio y/o expansión del cultivo celular a través de la siembra en un nuevo frasco.
Para ser más precisos, el nuevo microscopio invertido CKX53 permite la observación de células vivas de forma sencilla y eficaz gracias al nuevo sistema IPC, por medio del cual es posible realizar contraste de fases con un anillo común para todos los objetivos IPC desarrollados especialmente para este equipo y la visualización del cultivo celular en cada una de sus etapas. Este modelo es compatible con sistemas de iluminación de fluorescencia de 100 y 130W, el que acepta la utilización de hasta 3 cubos con filtros para la detección y visualización de moléculas fluorescentes. El tubo de observación trinocular ya incorporado permite la utilización de cámaras como la DP22 de 2.8MP con el sistema “stand alone”, que no requiere un computador, para la adquisición imágenes y registros de los distintos estados del cultivo.
Finalmente, destacamos en forma especial la cámara DP22 junto al nuevo software de análisis de confluencia CKX-CCSW, ambas herramientas poderosas para asegurar reproducibilidad de resultados al momento de realizar cinéticas de crecimiento o respuestas frente a estímulos. Estos junto al nuevo contador celular R1 con pantalla táctil para visualización y edición de protocolos, entrega un recuento preciso del número de células, favoreciendo la estandarización y la calidad de los resultados.
Todos estos equipos y muchos otros, se encuentran disponibles en nuestro showroom para demostración. Para visitas y otras consultas, pueden escribir a http://www.grupobios.cl/.
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