Nuevo estudio asegura que este «flechazo» es más común en los hombres.
Mientras algunos investigadores aseguran que es posible enamorarse en pocos segundos de otra persona, otros solo atribuyen este sentimiento a una fuerte atracción física.
Sebastián Moreno (31) asegura que desde el primer momento en que vio a su esposa, sintió lo que generalmente se define como «amor a primera vista». «Ella me ha gustado desde siempre; no fue algo que se construyó de a poco», dice.
Sin embargo, los investigadores todavía no se ponen de acuerdo sobre si este sentimiento existe realmente. Según un reciente estudio de la Universidad de Groningen (Países Bajos), titulado «What kind of love is love at first sight?» («¿Qué clase de amor es el amor a primera vista?»), que analizó los casos de 400 personas y que se publicó en la revista Personal Relationships, esta sensación no calificaría como «amor».
De acuerdo con los psicólogos que realizaron la investigación, las características que en general se asocian a este sentimiento, como la intimidad, el compromiso y la pasión, no eran particularmente fuertes en quienes decían sentir amor a primera vista. O al menos, no tanto como entre los que tenían una pareja establecida.
Por eso, su conclusión es que el amor a primera vista es solo una fuerte atracción física, la que haría a los sujetos particularmente abiertos a las posibilidades de una relación futura.
Mónica Silva, psicóloga y directora del centro de investigación y apoyo psicoterapéutico Vivir en Pareja, explica que lo que ocurre en nuestro organismo es una «invasión» de feromonas -sustancias químicas- que producen un estado de euforia. Según ella, esta sensación, provocada por un «flechazo», es la que se confundiría con el amor.
«El enamoramiento es ese sentimiento que nos produce una persona a la que le empezamos a descubrir algo que nos parece especial. A veces ocurre con alguien que apenas conocemos, y otras, con personas que hace tiempo conocíamos. Pero esto es solo una etapa en la vida de pareja», explica Silva. Eso sí, agrega que en algunos casos esto puede transformarse en amor y llegar a relaciones duraderas.
Una opinión distinta tiene Helen Fisher, doctora en antropología biológica e investigadora del Instituto Kinsey (EE.UU.), quien lleva cerca de 40 años de estudio en el campo del amor y las relaciones de pareja. Fisher ha escrito seis libros al respecto y dictó la charla TED «El cerebro enamorado» y «Por qué amamos, por qué engañamos».
Según ella, el amor a primera vista no es solo posible, sino que es un hecho. Tras realizar una serie de escáneres cerebrales, Fisher concluyó que el cerebro ha desarrollado tres sistemas para la reproducción, que pueden o no trabajar juntos: el de la lujuria, el del apego y, finalmente, el del amor romántico. El «flechazo» sucedería cuando este último se activa.
«Es algo totalmente distinto a la lujuria o la atracción física. Es querer presentarle la persona a tus padres, tener una relación, tener hijos con esa persona. Eso es el amor a primera vista», asegura Fisher a «El Mercurio».
Más selectivas
Otra conclusión a la que llegaron los investigadores de Países Bajos fue que en general el amor a primera vista -o atracción física fuerte- no es mutuo. Sin embargo, dicen que cuando un miembro de la pareja lo siente de manera intensa, puede hacer que su compañero crea que también él o ella sintió ese «flechazo». La presión social por tener un sentimiento mutuo podría alterar sus recuerdos.
Por último, los autores señalan que este sentir «amor a primera vista» se produciría más en hombres que en mujeres. ¿La explicación? Ellas serían más selectivas a la hora de escoger una pareja.
Adicción
El amor hace que se encienda en el cerebro la misma zona que al consumir cocaína, de acuerdo con los más de 100 escáneres cerebrales realizados por la doctora Helen Fisher, experta que lleva más de 40 años de estudio en el tema.
Por Sara Alfaro Cornejo.
Fuente: El Mercurio.
¿Quieres dejar un comentario?