El Dr. Omar Orellana, director de Investigación de la Facultad de Medicina, resaltó el hecho de que el laboratorio fuera gestionado por tres jóvenes investigadores, “lo que hace que este lugar tenga una proyección en el tiempo de larga data. Además, quiero destacar la concepción del recinto como un espacio para compartir donde se puede optimizar el trabajo, no solo desde el punto de vista de los recursos financieros, sino que también en relación a las ideas y puntos de vista que surgirán”.
Por su parte, el Dr. Benjamín Suárez, director del Instituto de Ciencias Biomédicas y quien dejará su cargo en los próximos días, dijo que “hoy es un momento feliz y la culminación de un ciclo al ver el resultado de este trabajo y que en un 75% es parte de la labor realizada por el equipo de construcción de nuestro Instituto”.
Sostuvo que el laboratorio se construyó en gran parte por los aportes de los proyectos de investigación adjudicados por los investigadores del ICBM. “Este esfuerzo que apoya a los investigadores jóvenes del Programa de Inmunología de la Facultad de Medicina se basó en el esfuerzo de muchas personas, pero debemos recordar que tenemos una tarea inconclusa en cuanto a mejorar la gestión no solo dentro de la Universidad de Chile, sino que también la valorización de la actividad científica en el país que permita generar conocimiento y así producir resultados que sean útiles a los problemas de salud de la sociedad”.
La Dra. Carmen Larrañaga, quien sucederá en el cargo al Dr. Suárez, subrayó que en el último tiempo se han construido o habilitado más de 2.000 metros cuadrados en el Instituto. “Quiero además agradecer al grupo que trabaja en el Programa de Inmunología y a su director, el Dr. Juan Carlos Aguillón, y muy especialmente a Diego Catalán, Carolina Ribeiro y Karina Pino, quienes fueron los gestores del proyecto”.
Precisamente, el Dr. Juan Carlos Aguillón agregó que “la construcción del laboratorio forma parte de la concepción como trabaja el Instituto de Ciencias Biomédicas desde sus inicios, es decir, una forma de investigar y hacer docencia de manera distinta basada en la cooperación. Esta es la única forma que hace sustentable la investigación hoy en día en Chile”.
Finalmente, Diego Catalán -a nombre de Karina y Carolina- agradeció a los académicos y autoridades del programa y de la Facultad de Medicina, a la directiva del ICBM, a los aportes del Instituto Milenio que colaboró en la habilitación del espacio y al equipo de construcción del Instituto. “Esperamos poder llenar de actividades el laboratorio, y retribuirle al programa y al ICBM con muchos proyectos y publicaciones en revistas de alto impacto internacional (ISI)”.
Fuente: ICBM
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